Mandato para el Liderazgo 2025: ¿El Fin de la Reserva Federal?
Imagina un Estados Unidos sin la Reserva Federal. Desde su creación en 1913, la Fed ha sido objeto de críticas constantes por su papel en los ciclos económicos de auge y recesión, la inflación y los rescates financieros. ¿Qué pasaría si simplemente dejáramos de depender de este gigante financiero? Esta es una de las preguntas que plantea el Mandato para el Liderazgo 2025, un ambicioso proyecto de la Fundación Heritage.
El Proyecto 2025: Un Plan Radical
Este documento, no oficial pero muy influyente, busca ser la guía definitiva para un futuro presidente conservador. A pesar de que Donald Trump ha tomado distancia del proyecto, muchas figuras clave de su primer mandato han contribuido a su elaboración. Según Paul Dans, director del Proyecto 2025, el objetivo es claro: “desmantelar el Estado Administrativo”.
Capítulo 24: Un Ataque Frontal a la Reserva Federal
El capítulo 24, escrito por Paul Winfree, se centra en la Reserva Federal y es, sin duda, el más controvertido. Winfree, un respetado miembro de la Fundación Heritage, no se anda con rodeos: sugiere abolir la Fed y regresar a un sistema de dinero respaldado por commodities. ¿Suena radical? Absolutamente. Pero también ofrece propuestas más moderadas para limitar el poder de la Fed si eliminarla resulta inviable.
Winfree presenta estas propuestas en orden de efectividad para combatir la inflación y los ciclos económicos. Primero, abolir la Fed y adoptar la banca libre. Luego, volver a un estándar de commodities. Estas ideas, aunque polémicas, apuntan a una crítica fundamental: el control gubernamental del dinero y la banca está roto.
¿Por Qué Abolir la Reserva Federal?
El capítulo argumenta que la Reserva Federal no solo falla en su misión, sino que agrava los problemas que pretende solucionar. Según Winfree, la Fed exacerba los ciclos de auge y recesión, desvaloriza el dólar, permite el gasto deficitario exorbitante del gobierno y elige ganadores y perdedores en los mercados financieros. Cada crisis aumenta su poder, perpetuando un círculo vicioso de intervención y dependencia.
Desde una perspectiva misesiana-rothbardiana, el capítulo tiene algunas fallas influenciadas por el monetarismo de Friedman. Pero comparado con los consejos tibios de los “keynesianos de derecha” de las décadas de 1980 y 1990, esta crítica a la Fed es un soplo de aire fresco.
La Gran Depresión y la Fed
El capítulo también aborda la Gran Depresión, citando la visión de Friedman de que la Fed no logró prevenir el colapso de la oferta monetaria de 1929 a 1933, lo que convirtió una recesión común en la Gran Depresión. Winfree señala que la mala gestión de la oferta monetaria por parte de la Fed prolongó innecesariamente la crisis de los años 30.
Alternativas a la Fed: ¿Reglas Arbitrarias o Soluciones Reales?
La influencia de Friedman es evidente en las propuestas políticas de Winfree. Después de abolir la Fed, sugiere la “Regla K-Percent” de Friedman, que fija una tasa de crecimiento de la oferta monetaria (por ejemplo, 3% anual). También propone otras reglas como la de objetivo de inflación, la regla de Taylor y la de objetivo de PIB nominal.
El problema, señala Winfree, es que todas estas reglas son arbitrarias y fácilmente manipulables. ¿Por qué un 3% de crecimiento de la oferta monetaria? ¿Por qué un objetivo de inflación del 2%? En una economía de mercado no intervenida, la norma sería una deflación constante debido al aumento en la producción de bienes y servicios.
Conclusión: ¿El Fin de la Fed es Viable?
Aunque estoy a favor de pasos incrementales para reducir el poder del Estado, las propuestas de reglas monetarias parecen más bien pasos laterales o hacia atrás. Una Fed comprometida con la regla de Taylor, por ejemplo, podría reforzar la percepción de que es una agencia imparcial y científica, lo cual no es el caso.
Al final, todas las ideas de reforma basada en reglas son discutibles debido a las presiones políticas. Las reglas son fácilmente dobladas y abandonadas cuando cambian los vientos políticos. La solución, según el capítulo, es quitar el volante monetario de las manos de la Fed y devolvérselo al pueblo.
Entonces, ¿es este el camino hacia una economía más libre y estable, o un riesgo innecesario para la estabilidad del país? La propuesta del Mandato para el Liderazgo 2025 ciertamente nos da mucho en qué pensar.