¿Por Qué el Premio Nobel 2024 a Acemoglu es Injusto? Crítica a su Teoría de Instituciones y Crecimiento Económico

El Premio Nobel de Economía de 2024 ha sido otorgado a Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson por sus aportaciones sobre crecimiento económico y formación de instituciones. Sin embargo, muchos nos preguntamos: ¿es realmente merecido este galardón? Si te interesa descubrir por qué este premio podría ser uno de los más injustos en la historia del Nobel, continua leyendo.

Premio Nobel Acemoglu

Primero, hablemos de lo que dicen estos economistas. Su principal idea es que las instituciones que se formaron durante la colonización europea de América (sí, hace casi 500 años) son las que determinan el éxito económico de los países hoy en día. En su investigación, argumentan que las áreas donde la mortalidad de los colonos europeos fue alta (debido a enfermedades tropicales, por ejemplo) acabaron formando instituciones extractivas, es decir, sistemas que solo beneficiaban a unos pocos a costa de muchos. Por otro lado, donde la mortalidad era baja, los colonos crearon instituciones “inclusivas”, que promovían el desarrollo a largo plazo.

Hasta aquí, suena interesante, ¿verdad? Pero, ¿de verdad tiene sentido basar toda una teoría económica moderna en datos de hace 500 años? Aquí es donde las cosas se complican.

El problema de ir tan lejos en el tiempo

Uno de los grandes puntos de Acemoglu y compañía es que la tasa de mortalidad de los colonos europeos en el siglo XVI fue crucial para el desarrollo institucional. ¡Pero estamos hablando de hace cinco siglos! ¿Es razonable pensar que algo tan antiguo todavía afecta nuestras economías hoy en día?

Y no solo eso. La historia que cuentan tiene agujeros gigantescos. Por ejemplo, afirman que los imperios densamente poblados, como el Inca y el Azteca, resistieron ferozmente la colonización europea, lo que supuestamente llevó a los colonizadores a imponer instituciones extractivas. Sin embargo, la realidad es que ambos imperios fueron conquistados rápidamente. Los españoles no encontraron una resistencia significativa, y en muy poco tiempo dominaron a esas grandes civilizaciones. Por otro lado, áreas mucho menos pobladas, como ciertas zonas de Guatemala o el sur de Chile, resistieron la colonización durante siglos. Entonces, ¿cómo encaja esto en la teoría de Acemoglu?

¿Qué pasa con las zonas más pobres de hoy?

Otra contradicción enorme es que, según los Nobel, donde hubo instituciones extractivas, hoy debería haber más pobreza. Sin embargo, si miramos a América Latina, las zonas más pobres son, curiosamente, aquellas donde los colonizadores españoles tuvieron menor presencia. Por ejemplo, las zonas indígenas de Guatemala o Bolivia, donde apenas llegaron las instituciones españolas, son hoy algunas de las regiones más pobres de toda América. ¿Cómo se explica esto?

La falsa idea de las instituciones “inclusivas” en las colonias inglesas

Otro de los argumentos clave de estos economistas es que en las colonias inglesas, donde había menos población indígena, se establecieron instituciones más inclusivas que permitían el desarrollo económico. Pero esta idea también se queda corta cuando la examinamos de cerca.

Acemoglu y sus colegas parecen pasar por alto el hecho de que las colonias inglesas estaban sujetas a fuertes restricciones comerciales impuestas por la metrópoli. Inglaterra controlaba quién podía comerciar y con quién, una práctica conocida como las Navigation Acts. Este tipo de control no suena muy “inclusivo”, ¿verdad? A pesar de ello, los colonos ingleses encontraron formas de hacer contrabando, lo que les permitió prosperar. Pero aquí es donde la teoría de los Nobel se contradice: ellos suelen ver el contrabando como algo negativo y perjudicial para el desarrollo, entonces, ¿por qué no lo critican en este caso?

Y no olvidemos la esclavitud

Los Nobel también parecen ignorar el papel de la esclavitud en las colonias inglesas. Aunque reconocen la existencia de instituciones extractivas en las colonias españolas, apenas mencionan la brutalidad de la esclavitud en las colonias inglesas. Lo cierto es que la esclavitud fue mucho más extendida y severa en los territorios bajo control inglés, y esto tuvo un impacto tremendo en las sociedades que surgieron de ellas.

El “revés de la fortuna”: otro error

Otro punto de la teoría de Acemoglu es lo que llaman el “revés de la fortuna”: los países que eran ricos en el pasado, como México, son ahora pobres, y los que eran pobres, como Estados Unidos, son hoy potencias económicas. Según ellos, esto se debe a las instituciones coloniales. Sin embargo, si analizamos Europa, también vemos un “revés de la fortuna” que no tiene nada que ver con la colonización. Por ejemplo, en el año 1500, España era la superpotencia de Europa, mientras que Inglaterra estaba rezagada. Pero para el siglo XVIII, antes de la Revolución Industrial, Inglaterra ya había superado a España en términos de desarrollo. Este cambio no tiene nada que ver con instituciones coloniales, entonces, ¿por qué Acemoglu y compañía insisten tanto en que su teoría se aplica universalmente?

Conclusión

Al final del día, lo que estos Nobel nos presentan es una teoría que suena bien en papel, pero que al mirarla de cerca está llena de errores históricos y simplificaciones. Claro, han creado un modelo atractivo sobre cómo las instituciones afectan el desarrollo económico, pero su falta de precisión y su dependencia en datos tan antiguos debilitan su argumento. Es un Nobel que parece más otorgado por la narrativa que por la solidez de sus hechos. Y, en ese sentido, probablemente sea uno de los premios más injustos en la historia del Nobel.

¿Tú qué opinas? ¿Crees que este premio fue merecido o piensas que la historia se cuenta de otra manera?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll to Top